No te entiendo, amor,
aunque intento
entender tus argumentos
de filósofo que se enreda
con sueños y tormentas.
Yo, sencilla sirena
sin cola de pececilla,
nado en paralelo.
Sigue, amor, soñando
entre tormenta y tormenta
de rayos de oro y fuego.
--------------------
Bonitas picardías en dos piezas de color blanco para mujeres enamoradas de sí mismas. ¿Te atreves a gústarte? Dale al link y haz la compra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario